En esta novela acompañamos a la protagonista Mia Fredrickersen de 55 años, en un camino de autodescubrimiento.
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Tras la “Pausa” que Boris, su marido, le pide, Mia sufre una crisis psicológica que le obliga a internarse en un psiquiátrico. Cuando sale decide ir a ver a su madre. Es verano, y durante estos meses reflexionará sobre su vida con la ayuda de nuevas amistades.
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Como he dicho, este libro se centra en Mia en los pensamientos sobre su vida, sobre sus relaciones pasadas y sobre Boris ya que estuvo media vida con él, pero también trata de las mujeres de su alrededor.
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En la novela vemos como va conociendo a mujeres de diferentes edades y de todas ellas aprende algo nuevo, desde sus alumnas en el taller de poseía, su vecina o hasta las amigas de su madre.
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Así se convierte en una novela donde el peso femenino es importante y donde nosotres como lectores vemos diferentes realidades.
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El libro esta muy bien escrito, a pesar de que en algunos momentos las partes más pensativas o rumiantes se me hacían un poquito densas, en su mayoría la lectura es agradable, podemos sentirnos incluso identificades en ciertos momentos.
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Pese a todo ello no ha sido una de las mejores lecturas que realicé en 2020, no sabría muy bien explicar la razón pero no me llegó lo suficiente. No todos los libros gustan por igual.
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No obstante, si os gustan este tipo de tramas donde la protagonista se autodescubre y las relaciones entre mujeres son importantes, seguro que os gustará.